Propensa a los accidentes

Esta semana estoy demasiado torpe. Se me caen las cosas y ya casi me parece normal. Así de regular se ha vuelto.

El domingo hice cheesecake. Con chispas de chocolate y licor. Estaba tan orgullosa de como había quedado. Pero cuando lo puse arriba del refigerador para que se enfriara ¡horror! me fui de espaldas al suelo y caí con postre y todo. Los gatos y la perra corrieron a tratar de arrebatarme un pedazo. Tenía cheesecake en toda la ropa y tuve que cambiarme y lavarla toda. El cheesecake se desarmó entero. Quedó rico, muuuuy rico, pero todo desarmado. ¡Qué rabia!

El otro accidente digno de contarse (hay otros que no voy a contar), sucedió hoy. Vino mi tía y salí a abrirle la puerta. Yo recién me había bañado así que andaba con la parte de arriba del pijama (que se amarra en el cuello y es de espalda rebajada), toalla en la cabeza, los jeans y pantuflas. Cuando abrí la puerta, la Negrita, mi perra, que estaba junto a mi, sale disparada corriendo. Segunda vez que me lo hace, claro que hoy fue peor. ¡Corrió 3 cuadras! Yo perdí la costumbre de correr así que casi me da un ataque. Dejé en la casa todo tirado, para correr tuve q quitarme la toalla de la cabeza y dejé las pantufleas en el camino. Imagínense correr así por las calles gritando " ¡Negritaaaa!" y ella entre más la llamaba, más corría. Si no fuera porque un par de veces paró a oler las flores, la pierdo. Me molesta eso si que la gente mirara y nadie me ayudara. Menos mal que ningún perro se le tiró encima. Debe haber terminado "la temporada".


Asi que ahora quiero descansar y que se me pase la racha de accidentes....ouch!